VAMOS DE ESTRENO (o no) * Viernes 12 de mayo de 2017 *
ALIEN COVENANT (Ridley Scott, 2017)
USA/Australia/Nueva Zelanda/UK. Duración: 123 min. Guion: Michael Green Música: Jed Kurzel Fotografía: Dariusz Wolski Productora: Twentieth Century Fox Film Corporation / Scott Free Productions / Brandywine Productions Género: Ciencia ficción
Reparto: Katherine Waterston, Michael Fassbender, Demián Bichir, Danny McBride,Noomi Rapace, Billy Crudup, Carmen Ejogo, Jussie Smollett, Amy Seimetz,Callie Hernandez, Benjamin Rigby, Alexander England, James Franco
Sinopsis: Rumbo a un remoto planeta al otro lado de la galaxia, la tripulación de la nave colonial Covenant descubre lo que creen que es un paraíso inexplorado, pero resulta que se trata de un mundo oscuro y hostil cuyo único habitante es un “sintético” llamado David (Michael Fassbender), superviviente de la malograda expedición de Prometheus…
Una nueva epopeya conectada con el universo Alien y de nuevo con mucho en común con sus predecesoras: protagonismo del personaje femenino (aunque con los pies más en tierra, se permite el lujo de pasar miedo y reflejarlo con sus lágrimas); acción, intriga y por supuesto terror, ya que no faltan los diversos xenomorfos en sus diferentes fases (huevo, abrazacaras, revientapechos…) y en alguna variedad nueva como lo es aquella (de textura muy similar a las de Del Toro) tras la que adivinamos a nuestro Javier Botet.
Ridley Scott ha realizado un espectáculo in crescendo que añade nuevas pistas sobre el origen de esas terribles criaturas las cuales, al igual que sucedía en Prometheus (2012), no son las protagonistas de la función, pues ese papel está reservado para la inteligencia artificial y su conexión filosófica con su creador. Algo que enlaza la cinta directamente a Blade Runner (1982) del mismo Scott, -pues idénticas preguntas son las que se hacen los sintéticos- y, por descontado, con la simpática creación de la Señorita Shelley.
Si bien uno se alegra de que por una vez los héroes supervivientes de la función no sean unos bellos ejemplares hipermusculados, lo cierto es que Katherine Waterston no posee el suficiente carisma, en este caso, como para que su personaje y sus avatares nos hayan interesado en demasía. Aún así, se agradece la humanización de la heroína, que lejos de ser vocacional, le mueve el terror y el instinto de supervivencia, a pesar de que la tragedia ha truncado su futuro proyecto de vida.
Otro eslabón más en la saga Alien, quizás no uno de los más brillantes, pero lo suficientemente digno y que añade más información con la que llegar a esa tercera y última entrega de esta precuela. Qué raro suena todo esto ¡Qué tiempos nos han tocado vivir!
BAJO EL SOL (Zvizdan, Dalibor Matanic, 2015)
Croacia/Serbia/Eslovenia Duración: 123 min. Guion: Dalibor Matanic Música: Alen Sinkauz, Nenad Sinkauz Fotografía: Marko Brdar Productora: Kinorama / Gustav Film / See Film Pro Género: Drama
- Reparto: Tihana Lazovic, Goran Markovic, Nives Ivankovic, Mira Banjac, Slavko Sobin, Dado Cosic, Trpimir Jurkic, Lukrecija Tudor, Stipe Radoja
- Sinopsis: Tres décadas. Dos naciones. Tres historias de amor consecutivas entre una mujer serbia y un hombre croata dentro del corazón envenenado de los Balcanes.
- 1991. Jelena (Tihana Lazovic) e Ivan (Goran Markovic) están a punto de abandonar su pueblo natal para ir a Zagreb juntos. Ella es serbia y él croata y las primeras explosiones de odio étnico amenazan con dar al traste con su escapada.
- 2001. Tras la guerra, La joven serbia Natasa (Tihana Lazovic) vuelve con su madre a la casa en la que creció y en la que se abren las héridas profundas que ha sufrido. Ante (Goran Markovic), croata, se compromete a trabajar en el arreglo de la vieja casa. Ella no soporta su presencia.
- 2011. Luka (Goran Markovic), croata, vuelve a casa para una fiesta después de una larga ausencia. Visita a sus padres y lucha con la tentación de buscar a Marija (Tihana Lazovic), la joven serbia con la que tuvo algo más que una relación.
- Un canto a la vida que ha conmovido al jurado del Festival de Cannes. Bajo el sol nos cuenta tres historias diferentes, situadas en el mismo lugar, con diferentes personajes, los mismos actores y diez años de diferencia entre ellas. La primera se desarrollará en 1991, en ciernes del conflicto que romperá el país, familias y amistades. En un pequeño entorno en el que todos se conocen, comienzan a formarse los bandos. Ese es el campo de cultivo en el que se enamorarán la serbia Jelena y el croata Ivan.
- La segunda historia se desarrolla diez años después, tras la guerra, y nos mostrará un paisaje desolado, repleto de cicatrices causadas por la cruenta contienda. Se intentará reconstruir, volver a empezar. Y siempre con el lago como nexo común en todas las historias, como remanso de paz, Natasa y Ante cargarán con las heridas en su alma. Se palpa el odio, también el deseo. Pero el perdón es imposible.
- Finalmente, y ya en 2011, la vuelta al hogar y por fin la convivencia entre Serbia (Marija) y Croacia (Luka), imprescindible, pues hay un futuro en común representado por el hijo de ambos, al cual deben cuidar y sacar adelante.
Al igual que la reciente Hotel Europa, que también tenía como fondo el (¿eterno?) conflicto de los Balcanes, Bajo el sol evita, en lo posible, mostrar escenas bélicas o de violencia, demostrando Matanic un gran talento y mucha sensibilidad, así como un gran cuidado en el detalle sutil. Un magnífica película con buenas interpretaciones. Y una lección de humanidad sin caer en buenismos vacuos.
-
2015: Festival de Cannes: Premio Especial del Jurado («Un Certain Regard»)2015: Satellite Awards: Nominada a Mejor película de habla no inglesa2016: Premios del Cine Europeo: Nominada al Premio del Público
MARAVILLOSA FAMILIA EN TOKIO (Kazoku wa tsuraiyo, Yôji Yamada, 2016)
Japón Duración: 108 min. Guion: Yôji Yamada, Emiko Hiramatsu Música: Joe Hisaishi Fotografía: Shinji Chikamori Productora: Shochiku Company Género:Comedia
Reparto: Satoshi Tsumabuki, Yû Aoi, Yui Natsukawa, Kazuko Yoshiyuki,Masahiko Nishimura, Isao Hashizume, Tomoko Nakajima, Shozo Hayashiya
Sinopsis: El día de su cumpleaños, la mujer del pater familias de una tradicional familia de Tokio, le pide a su cascarrabias marido como regalo, el divorcio. Esta revelación no sólo chocará a su incrédulo marido, sino a toda la familia, quienes intentarán por todos los medios evitar la catástrofe familiar.
La nueva película de Yôji Yamada viene en forma de comedia familiar en la que el director vuelve a reunir a los 8 actores de Una familia de Tokio, ganadora de la Espiga de Oro en Valladolid en 2013, esta vez encarnando a la caótica familia Hirata, de la que algo más cabía esperar.
Esta película, su argumento, e incluso la interpretación del abuelo, su gran protagonista, nos retrotrae a los ejemplos más infames de las comedias protagonizadas por Paco Martínez Soria. Recuerda también a esa pretéritas cintas por el trato reservado hacia la mujer, bastante retrógrado fruto, posiblemente, del elemento cultural diferencial japonés, que también se acusa en un humor bastante primario, de porrazo, caída y tentetieso que uno ya daba por superado.
Y eso a pesar de que el punto de partida de la cinta resulta más que prometedor, pero no así su convencional conclusión, que resulta casi dramática por el mensaje que trasmite al espectador. Aunque sigue bajo la sombra de Ozu, en un momento del filme sus protagonistas verán en televisión Cuentos de Tokio, en esta ocasión no ha estado tan acertado como en su cinta de 2013. Eso sí, un desacierto de Yamada sigue valiendo más que los aciertos de muchos otros.
LE LLAMABAN JEEG ROBOT (Lo chiamavano Jeeg Robot, Gabrielle Mainetti, 2015)
- Italia. Duración: 112 min. Guion:Nicola Guaglianone, Menotti (Historia: Nicola Guaglianone) Música:Michele Braga, Gabriele Mainetti Fotografía: Michele D’Attanasio Productora: Goon Films / Rai Cinema / Ministero per i Beni e le Attività Culturali (MiBAC) Género: Drama fantástico
- Reparto: Claudio Santamaria, Luca Marinelli, Stefano Ambrogi, Maurizio Tesei, Ilenia Pastorelli, Francesco Formichetti, Daniele Trombetti, Antonia Truppo, Salvatore Esposito, Gianluca Di Gennaro
- Sinopsis: Enzo Ceccoti (Claudio Santamaria), un convicto, entra en contacto con una sustancia radioactiva. Tras el accidente descubre que tiene una fuerza sobrehumana, por lo que decide utilizar sus poderes para comenzar una carrera criminal. Todo cambia, no obstante, cuando conoce a Alessia (Ilenia Pastorelli, una chica que está convencida de que él es el héroe del manga Jeeg Steel.
Una muy atípica película de superhéroes. Violenta, con toques de humor y también drama, puede decirse que esta cinta, ópera prima de su director Gabrielle Mainetti, tiene de todo. Lo que comienza como una violenta historia con bandas de maleantes de segunda, comandados por Zíngaro (Luca Marinelli), un enloquecido capo que terminará enfrentándose directamente contra la mafia napolitana, se convertirá por azar, en una película con superhéroe y supervillano cuando Enzo (Claudio Santamaria), pura basura blanca, consumidor compulsivo de natillas y pornografía, tenga un accidente y su cuerpo sea impregnado por unos productos químicos que lo convertirán en un superhombre. Sórdida, violenta y no apta para menores, esta pesimista historia tendrá su parte lírica, y también tiernamente grotesca, en Alessia (Ilenia Pastorelli), una chica enloquecida que admirará a Enzo. Un alma cándida que entre tanta violencia servirá de contrapunto a todos estos matones.
Sin lugar a dudas una muy italiana y original forma de acercarse al superhéroe que ha sido muy bien recibida por la crítica, que la premió en su país con siete David di Donatello, entre ellos como mejor ópera prima, actor, actriz y secundarios. Y en el Festival de Sitges de 2016 como mejor película en la Sección Órbita.
Últimos comentarios