Archivo

Archive for 28 abril 2017

El slasher mediterráneo ‘Verano rojo’ abrirá el 3r Sant Cugat Fantàstic que tendrá lugar del 15 al 18 de junio

Sant Cugat Fantàstic, Festival Internacional de Cinema Fantàstic i de Terror de Sant Cugat, comenzó a desvelar algunos detalles de lo que vienen preparando para esta tercera edición en una animada rueda de prensa que tuvo lugar en la fábrica Damm. Al igual que el año pasado el festival se alargará durante cuatro días, celebrándose del 15 al 18 de junio teniendo como centro neurálgico los Cines Cinesa Sant Cugat para las proyecciones,  y las instalaciones del Teatre-Auditori y su entorno para las diferentes actividades paralelas. En esta edición el cine de animación y el fantástico compartirán protagonismo, ya que uno de los leit motivs del festival será justamente la animación en el cine. Como explica Joan Ramon Armadàs, subdirector del certamen, “No sólo tenemos muy buenos profesionales haciendo animación en nuestra casa, sino que en todo el mundo cada año encontramos films sorprendentes en esta disciplina a los cuales no se los presta tanta atención como a los de imagen real.

Durante la rueda de prensa también se presentó el póster oficial, realizado por Mo Caró, dibujante e ilustrador de conocida adscripción con el mundo del cine, especialmente fantástico, que ha realizado recientemente imágenes promocionales para diferentes películas de género como Star Trek: Beyond o Chappie, entre otras. Para el póster que ha realizado para  Sant Cugat Fantástic, se ha inspirado en el universo del director Tim Burton que, según él, es uno de los mejores ejemplos y un referente a la hora de ligar terror y animación.

J. R. Armadàs y Marc Carreté junto al artista Mo Caró, presentando el póster que ha realizado para esta tercera edición de Sant Cugat Fantàstic (Foto: Serendipia)

PRIMEROS LARGOMETRAJES CONFIRMADOS

Verano rojo, la ópera prima del director mallorquín Carles Jofre, tendrá su premiere inaugurando esta tercera edición de Sant Cugat Fantàstic la noche del jueves 15 de junio. Esta cinta independiente protagonizado por Inés Pálmer, Juanan Cruz y Aina Zuazaga es todo un homenaje al slasher. Según el codirector del festival, Marc Carreté, Verano rojo “Representa muy bien el tipo de cine que creemos que un festival como el nuestro tiene que apoyar y hacerlo llegar al público. Cine de terror, 100% independiente, un film desacomplejado y bien realizado, producido desde el oficio y la pasión, por un equipo de gente que ha picado piedra y se ha dejado el alma por levantar el proyecto y hacerlo realidad”.

Pàtria  de Joan Frank Charansonnet, es una producción catalana totalmente independiente que narra la leyenda de Otger Cataló, personaje interpretado por Miquel Sitjar. Esta película épica con pinceladas fantásticas será el film inaugural de la 10ª edición del FIC-CAT tras pasar por Nice International Film Festival.

Charansonnet presentando Pàtria (Foto: Serendipia)

Maniac Tales (Denise Castro, Enrique García, Abdelatif Hwidar, Kike Mesa, Rodrigo Sancho) es un film coral compuesto por cinco relatos dirigidos por cinco directores con sus historias unidas por una historia troncal.

Monster Hunt (Raman Hui) Es la segunda producción china más taquillera de su historia que ofrece aventura, humor y fantasía para toda la familia combinando imagen real y animación digital.

En la producción vasca El ataúd de cristal una actriz (Paola Bontempi), sube a la limusina que tiene que llevarla a recoger un premio, pero verá su viaje truncado por una serie de circunstancias que harán de esa la peor noche de su vida. Un único personaje y un escenario claustrofóbico para una cinta dirigida por Haritz Zubillaga que despliega, con una caradura inusual, un inesperado imaginario fantástico que la hizo merecedora de buenas críticas durante su presentación en el último Festival de Sitges.

ALGUNOS CORTOMETRAJES

El cortometraje que acompañará Verano rojo en la inauguración será Hoy me ha pasado algo muy bestia. Dirigido por Iván Mulero y basado en el libro y el cómic homónimo de Daniel Estorach, está protagonizado por Octavi Pujades y Marta Blanc y narra las aventuras de un superhéroe, el Justiciero del Post-it, en la Barcelona del siglo XXI.

Sant Cugat Fantástic también contará con dos producción catalanas de animación: Darrell, de Marc Briones y Alan Carabantes una cinta realizada en animación en 3D, nominada al Goya y premiada como Mejor Cortometraje Animado en el Festival de Sitges; y Cavalls morts, un cuento de guerra realizado en stop-motion por Marc Riba y Anna Solanas que ganó en la primera edición de los Premis VOC. También Gentleman de Joaquim Bundó y Esteve Rovia; Wolves de Àlvaro Rodríguez; Fe, del escritor y guionista Juan de Dios Garduño; y el corto japonés Wolf of Vengeance de Masakatsu Higuchioptarán al premio Òmnium al Mejor Corto.

PATROCINIOS Y APOYOS

Hace falta subrayar que el Sant Cugat Fantàstic es posible gracias al apoyo de Estrella Damm, patrocinador principal del evento, la colaboración de las instituciones públicas como el Ayuntamiento de Sant Cugat y el Teatre-Auditori y el compromiso de empresas como Cinesa y HP entre otras.

… y estando en la casa de la Damm, uno de los patrocinadores del festival, era natural que los asistentes pudieran departir tras la presentación tomando unas muestras de tan preciado néctar (Foto: Serendipia)

BCN Film Fest: Un italiano en Noruega, descubriendo a Checco Zalone

Algo a agradecer al recién nacido BCN Film Fest es que haya incluido a competición una sección dedicada a la comedia, género que ha dado grandes perlas al cine y que, en nuestra consideración, no ha recibido suficiente reconocimiento en los certámenes cinematográficos. Un género de amplio espectro, además, puesto que son muchos los registros que ha dado a lo largo de la historia. No vamos a esbozarlos porque eso requeriría un espacio del que no disponemos y nos distraería del objeto de este comentario, pero sí queremos señalar que entre los grandes momentos que nos ha dado destacan aquellos que nos llegaron desde Italia. La Commedia all’italiana, que se inició en la década de los cincuenta y se extendió hasta los primeros ochenta, heredaba del neorrealismo su carga de crítica social, pero para abordarla con una mirada más afilada y cáustica en el retrato satírico de la realidad, en el dibujo humorístico de los personajes y en la aguda ironía que podía aplicarse a los cambios de costumbres de la época. Y hablamos de la edad de oro de la comedia transalpina porque hay quienes han querido ver en Checco Zalone, protagonista de la película que comentamos, un heredero de aquella.

Checco Zalone todo un ídolo en su país gracias a su múltiple condición de cantautor, actor cómico y showman de TV, consolidaba su carrera con su incorporación al mundo del cine. Son cuatro las películas que componen su filmografía hasta el momento, todas ellas dirigidas por Gennaro Nunziante con quien Zalone coescribe los guiones. Su debut en el Séptimo Arte fue meteórico, su primer filme, Cado dalle nubi, fue el más taquillero a nivel local (pasando por delante de La Vita é Bella) a la par de ser la segunda película más vista en Italia teniendo sólo por delante el Avatar de James Cameron. Caricato en sus inicios, Zalone se ha convertido en uno de esos cómicos cuyo personaje es un trasunto de sí mismo (actor y personaje comparten de hecho el mismo nombre) como fuera el caso de Louis de Funes, Fernandel o Totó por poner otro ejemplo italiano en el que la identificación es tal que el alias del actor se extiende a su personaje. Su humor se asienta en la parodia de trazo grueso (sin llegar a caer demasiado en lo escatológico) y sus películas se definen por la acumulación de situaciones cómicas y chistes. Reputado en Italia es prácticamente un desconocido en nuestro país, su última película, Quo Vado? es la primera en llegar a nuestras salas, de la mano de A Contracorriente, bajo el título de Un italiano en Noruega.

¿Qué decir de Un italiano en Noruega? Lo primero que nos sugiere es que el Checco Zalone personaje viene a ser un equivalente a nuestro Torrente, esto es, un personaje que va a servir como denuncia de los más rancio del país, de los males inscritos en la idiosincrasia de un pueblo, exagerando hasta la náusea sus perfiles. Sin dejar de recurrir a los tópicos, ambos mantienen una vis crítica de los mismos buscando una cierta reflexión sobre el nosotros de cada país. Se parecen en su singularidad, una singularidad no totalmente exportable, sin embargo. Por eso, aunque trate temas que nos suenan afines, la indolencia de los burócratas, las corruptelas políticas e incluso la alusión al civismo (incivismo, mejor) mediterráneo, Checco Zalone no deja de resultarnos extraño, como extraño ha de resultar Torrente más allá de nuestras fronteras. Fuera de esto, Un italiano en Noruega, puede llegar a entretener por esa acumulación de situaciones cómicas de la que hablábamos en el párrafo anterior, pero en ningún momento brilla como esas comedias italianas de su época dorada, le falta causticidad en su diseño y a la vez su ironía carece de sutileza. Su trazo grueso la hace superficial e inocua. Si puede resultar algo punzante en su primer acto, esta condición se va diluyendo conforme avanza la película y va siendo dominada y domesticada por la trama romántica. Tampoco es una película despreciable pese a su desigual desarrollo, algunos de sus chistes harán reír al público y en general se saldrá del cine con la impresión de haber consumido un producto simpático. Nada más ni nada menos.

 

 

 

A %d blogueros les gusta esto: